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 2706-5421

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La Turbococina, un invento que ayudaría al medio ambiente

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El calentamiento global es un tema que no puede ser obviado por los gobiernos del mundo. La resiliencia ante el cambio climático debe ser más agradable para la población salvadoreña; por lo tanto, es de suma importancia que el Gobierno, Ministerio del Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), empresa privada, oenegés, universidades y otras instituciones luchen por rescatar el medio ambiente. 

El  gobierno de El Salvador creó  El  Ministerio del  Medio Ambiente con la misión de cuidar nuestros medios naturales y tiene la responsabilidad de proteger los bosques, en  especial los cafetales,  los que representan un 10 % de oxígeno del país, un gran pulmón para todos los habitantes. Ojalá que se apoye  a no seguir degradando  y  derribando este  bosque que aún nos  queda.  Es necesario y urgente que cuidemos los recursos naturales.

Los países más industrializados, China y Estados Unidos, están haciendo lo suyo, aunque ellos son los que contaminan más al planeta Tierra. Las consecuencias del cambio climático nos llegan a todos, ejemplos: los fenómenos del “niño” y la “niña”. Sus estragos han dejado huella, en especial, a los agricultores de la zona oriental de El Salvador. 

¿Han escuchado hablar de la turbococina? En El Salvador tenemos una parte de la solución para contrarrestar el calentamiento  global o el cambio climático, el Ingeniero René Núñez, quien con su maravilloso invento “la  turbococina”,  ha  participado  en conferencias  mundiales, el principal  aporte  con el invento es “reducir  las  emisiones  de  gases. Esta es una cocina que no emite ningún gas, solamente utiliza un trozo de leña para cocinar. ¿Qué ingenio de salvadoreño verdad? Si se apoyase masivamente el invento del ingeniero Núñez tendríamos una oportunidad de paliar esta problemática global que es irreversible. Se ahorraría mucha leña, no se contaminaría el aire que respiramos y se combatiría la deforestación.  

Para explicar bien el proceso de la turbo combustión, con cinco trozos pequeños de leña de cuatro pulgadas que caben en ambas palmas de la mano, se pueden cocinar  cuatro libras de frijoles. Recordemos que usualmente se gasta bastante leña para poder conseguir el cocimiento. En el país se hicieron experimentos y resultó ser un éxito. Esta es una muestra de cómo trabaja la turbococina y cómo fue engañado por sus socios:

Fuese interesante que esta temática se difundiera en todos los centros educativos de El Salvador para hacer conciencia a los niños y jóvenes, y nos unamos para ayudar a nuestro planeta. Con la turbococina se ahorraría el consumo de leña, en especial en el área rural; además, de ser un invento que hasta ha sido reconocido por la NASA. Con este invento, se eliminaría el 9% del consumo de leña. 

Actualmente René Núñez ha estado luchando legalmente por cuidar la patente de su invento; según los comunicados expuestos en sus redes sociales y otros medios, se la han querido robar.  Es un asunto legal:  es preocupante saber que un magnifico invento, el cual tiene más de ocho años de estar planificándose la construcción de miles de cocinas a nivel mundial, se están manipulando los derechos de invención. El inventor aún sueña con su fabricación. 

Según decreto de la Asamblea Legislativa 1045, julio del 2002, se reconoció el derecho de propiedad intelectual al Ingeniero René Núñez Suárez por la invención de la turbocombustión o combustión a baja temperatura.  Además se decretó Hijo Meritísimo de El Salvador.

La turbococina es una de las soluciones para superar los embates del medio ambiente. Se espera que ese invento se reproduzca por millones en todo el mundo. Tuve el honor de conocer personalmente al ingeniero Núñez en la Universidad Francisco Gavidia cuando presentó a la academia y público en general su ingenioso invento. Sin duda alguna la turbococina es parte de la solución al problema de medio ambiente.