Susana Joma
Cerca de 20,000 docentes con enfermedades crónicas sin poder retirarse de las aulas, según dirigente de Bases Magisteriales
Los bajos montos que tienen las pensiones en el país, según la gremial Bases Magisteriales Salvadoreñas (BMS), son la causa de que un alto porcentaje de profesores en edad de retirarse y que luchan con males crónicos sigan laborando en las aulas del sistema público entre el cansancio y dolores.
David Rodríguez, secretario de organización de Bases Magisteriales, afirmó este 18 de julio en la entrevista Encuentro con Julio Villagrán, en TVX, que hay un estimado de 20,000 profesores con más de alguna enfermedad crónica que están activos.
Consultado por Disruptiva Media sobre el perfil de estos docentes Rodríguez señaló que los hay de entre los 30 y 70 años. “Los que más impactan, tenemos un promedio como cerca de 200 profesores con enfermedades renales; tenemos profesores con cáncer; (con) problemas psiquiátricos. Hay un alto porcentaje de compañeros con diabetes, tenemos algunos que están teniendo problemas de obesidad, trastornos psicológicos”, agregó.
Según detalló en el espacio televisivo “en promedio un profesor antes se iba con una pensión de $750 dólares, (pero) los que nacimos un día después del 15 de abril de 1962 nos vamos a ir con suerte con $400 dólares”, de los que todavía se les descontará para tener acceso al servicio de atención médica en el Instituto de Bienestar Magisterial (ISBM).
El docente aseguró que los profesores que, por alguna necesidad, retiraron el 25 % de sus ahorros de las AFP antes de la más reciente reforma (2022) aprobada por los diputados, la pensión les quedará de $268 dólares. “No es culpa del maestro haberse quedado (trabajando) después de cumplir los requisitos para pensionarse, es que hay una realidad, imagínese usted quién va a sobrevivir en este país con $268 dólares después de haber dejado 40 o 45 años (en el trabajo). Esto es real”, insistió.
El secretario de operaciones de BMS reiteró que muchos de los docentes enfermos durante años han atendido a miles de estudiantes en contextos adversos, desde la guerra, la violencia de las pandillas, entre otros. “Nos han dicho (los educadores), en las visitas que nosotros hacemos al territorio, mire profesor salvo que me saquen obligado me voy a retirar, pero yo no me voy de aquí porque tengo dos hijos que dependen de mí, porque estoy pagando la casa, porque tengo un hijo que depende de un medicamento que yo le compro…”.
Rodríguez lamentó que en los últimos años solo se haya querido vincular el hecho de que un porcentaje del magisterio está envejecido, que no maneja la tecnología, con la baja calidad de la educación, los bajos resultados obtenidos en pruebas internacionales, como el caso de PISA, donde los estudiantes de El Salvador se ubicaron en las últimas posiciones de aprendizaje, sin embargo, señala que en la práctica eso depende de muchos factores, incluyendo la baja inversión en educación que se ha tenido. “El llamado que hemos hecho a los diputados es que corrijan la plana (con el tema de las pensiones, para mejorarlas) si quieren que los educadores se retiren para rejuvenecer el magisterio”, indicó el dirigente sindical al mismo tiempo de insistir que las actuales pensiones “son de hambre”.
El profesor habló de cómo el presupuesto de 1,500 millones de dólares asignado a Educación para 2024 ha sufrido un recorte de 163 millones de dólares, de los que, según información compartida, el gobierno prevé tomar 118 millones de dólares para entregar compensaciones a un sector del magisterio que despedirán, algo que espera que no ocurra.
En opinión del representante de Bases Magisteriales el hecho de que recorten fondos al rubro educativo refleja que no hay un compromiso del Estado, del Ministerio de Educación, de mejorar la educación del país, incluso recordó que no se ha cumplido al dedillo la promesa de atender la infraestructura de las 5,000 escuelas.
Advierte que en el proceso de aprendizaje de los estudiantes incide el total apoyo financiero que debe haber para las escuelas, la situación del profesor, del mismo niño y de los padres de familia.
Falta asistencia informática en las escuelas
En el espacio televisivo digital, Rodríguez igual abordó problemas que los docentes tienen en las aulas, uno de ellos el que los estudiantes no usan las computadoras y tabletas entregadas por el gobierno con fines educativos como se esperaba, sino para ver otros contenidos. Comentó que si bien los alumnos dominan otros juegos comerciales no hacen lo propio con los programas educativos que los equipos ya traen instalados.
Lamentó que Educación haya quitado a las escuelas los técnicos en informática de los Centros de Recursos de Aprendizaje, porque, según sus palabras, eso también ha influido para que los estudiantes no provechen adecuado de los equipos.
Sostuvo que, en la actualidad, a los profesores, con lo poco que saben de estas tecnologías, les toca enseñar a los estudiantes hasta como encender equipos, estarles creando a todos sus contraseñas, entre otros aspectos que atendían los técnicos, quienes fueron enviados a ejercer cargos distintos de su perfil.
Proveedores piden ayuda
El educador también expuso que los microempresarios que han venido proveyendo uniformes y calzado a los estudiantes de las escuelas públicas, han pedido auxilio a la gremial para hacerle un llamado al presidente Nayib Bukele, a fin de que el gobierno les cancele lo que les adeudan hasta la fecha.
Según Rodríguez el llamado de los proveedores surge luego de que el director de Centros Penales anunciara a Bukele, en cadena nacional, que en adelante los privados de libertad en fase de confianza confeccionarán los uniformes escolares, lo cual implica que dejarán fuera de la competencia, en momentos en que tienen que pagar préstamos que hicieron para comprar maquinaria, materiales, y otros recursos que necesitaban para responder al buen servicio que les demandaban.
Un grupo de proveedores, este 18 de julio, también planteó la problemática en una actividad realizada en la plaza El Salvador del Mundo. Las deudas del gobierno con ellos, según afirman, vienen acumuladas desde 2023.