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 2706-5421

Lamina IX Humor social 2
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Susana Joma / Raúl Benítez

IX Estudio de Humor Social y Político del CEC – UFG evidencia rechazo y dudas de salvadoreños a la explotación de la minería metálica en el país

La visión de los salvadoreños ante hechos que impactan su vida diaria y la sociedad estaría marcada por sus creencias conservadoras; según revela IX Estudio de Humor Social y Político: Pensamiento religioso de los ciudadanos, temas de coyuntura y minería, del Centro de Estudios Ciudadanos (CEC), de la Universidad Francisco Gavidia (UFG).  

Este estudio, basado en entrevistas realizadas casa por casa a 1,225 personas, a nivel nacional, entre el 11 y 15 de enero, también evidenció un notorio rechazo a que en El Salvador se inicien proyectos de minería metálica, una puerta que se abrió luego de que el presidente Nayib Bukele, con apoyo de los diputados de Nuevas Ideas, derogara la ley que prohibía la minería en el país y emitieron otra que favorece dicha industria extractivista. 

Los resultados de este ejercicio académico, presentados este 21 de enero por el doctor Oscar Picardo Joao, director de Proyectos y Transferencia Tecnológica (DTT) de la UFG, muestran que el 78.12 % del total de entrevistados se considera creyente; 17.39 % muy religioso; 2.86 % agnóstico y 1.63 % ateo.  

Los datos también revelan el alcance que en la actualidad tienen algunas líneas religiosas, para el caso el 47.02 % declaró pertenecer a la iglesia evangélica, 36.82 % a la católica; 12.98 % no pertenecen a ninguna denominación y 1.55 % está en otra religión. 

Al revisar los datos se observa que, si bien hay un número significativo de creyentes, hubo quienes reconocieron que no siempre están tan involucrados con las actividades religiosas: El 38.53 % dijo ser practicante; el 27.92 % señaló que no es practicante; un 3.59 % se definió como muy practicante y el 13.31 % incluso dijo que tiene responsabilidades dentro de la iglesia, en este último caso por ejemplo mencionaron ser predicadores, formar parte del coro, ser pastores, músicos y acólitos. 

Entre los salvadoreños de 18 años o más que fueron consultados el 46.04 % afirmó haber practicado ayuno alguna vez; 12.49 % haber cumplido una promesa y 39.43 % ninguna de esas. 

La creencia en un ser divino 

En este estudio de tipo cuantitativo también se trató de obtener un panorama sobre el pensamiento crítico religioso de las personas. Así se exploró algunos conceptos como el origen de los seres humanos, la aplicación de la justicia, la existencia de Dios, la confianza en el ser superior, la salud y los milagros, entre otros. En este caso se utilizó una escala de medición que va del 1 al 10.  

Un promedio de 9.26 de entrevistados dijo que somos producto de la creación de Dios; también un promedio de 8.74 cree en la justicia divina, más que en la terrenal. 

El 89.1 % de los encuestados cree que las cosas suceden por la providencia o predestinación divina y solo el 10.9 % lo atribuye al azar, la suerte o el destino.  

Un número significativo, 90.3 %, dijo tener firme confianza en Dios y solo el 9.7 % en el gobierno. 

Son muy pocos salvadoreños, apenas el 3.5 %, los que dijeron tener convicción de que Dios no existe, mientras el 96.5 % está convencido que sí existe. 

Hay una clara diferencia entre los ciudadanos que manifestaron que creen más en las instituciones religiosas, 71. 4%, respecto a los que creen en las instituciones humanas, 28.6 %. 

Otras de las preguntas estuvieron relacionadas con la confianza que la persona tiene en sí mismo o en el poder de la oración ante determinadas situaciones; incluso si a la hora de enfrentar alguna enfermedad tienen confianza en la medicina o lo dejan a sus creencias. En este último caso 31.0 % cree en los tratamientos médicos, mientras el 69.0 % cree más en los milagros como forma de curación. 

Los salvadoreños, además fueron consultados sobre si necesitan asistir a un culto e iglesia semanalmente o no; a quién adjudican la responsabilidad de las cosas malas que suceden, entre otros tópicos afines. 

Las implicaciones de la Biblia 

El 91. 4 % de los ciudadanos que participaron en este estudio de opinión (o un promedio de 9.17) conciben la Biblia como un libro escrito por Dios y el 8.6 % la ven como parte de la literatura cultural.  

En este contexto el 71.4 % considera que el conocimiento que proviene de la religión o la Biblia es más confiable que el conocimiento científico, el 22.7 % está en desacuerdo con esa afirmación y un 6.0 % dijo no saber. 

Aunque un número significativo creen más en lo que dice la Biblia, cuando se preguntó si los avances tecnológicos y científicos son esenciales para el progreso humano hay un 85.3% que está de acuerdo; 11.7 % en desacuerdo y 3.0 % no sabe o no conoce. 

Ante situaciones complejas que se le presentan 85.3 % manifestó que prefiere recurrir a Dios, a la oración, al consejo de un pastor o un sacerdote, por sobre un 13.6 % que no lo hace y un 1.1 % que respondió no saber.  

El determinismo de la religión en la vida de los salvadoreños es tal que al preguntarles si la enfermedad, inclusive la muerte son un mensaje de Dios el 71.8 % dijo estar de acuerdo con esa idea; el 24.7 % expresó desacuerdo y 3.5 % dijo no saber.  

No obstante, ante fenómenos naturales, como el clima o desastres naturales, el 66.0 % busca explicaciones científicas para entender lo que ocurre; el 30.5 % no lo hace y el 3.5 % dijo no conocer. Además, 55.8 % consideran que las opiniones de los científicos son más creíbles que las de los líderes religiosos, frente al 35.8 % que está en desacuerdo con esa afirmación y el 8.5 % que señaló no saber. 

Con este marcado pensamiento religioso no es extraño que el 92.7 % se muestre de acuerdo con la idea de que es fundamental enseñar la Biblia en la escuela para que seamos buenos ciudadanos; el .69 % no está de acuerdo con esa idea y el 0.4 % optó por responder que no conoce. 

El IX Estudio Humor Social y Político realizado por el CEC aborda de igual las opiniones sobre el tema de la fe, de dónde proviene y qué líderes religiosos y políticos considera que son enviadas por Dios para una misión en nuestro país, barajando nombres como Monseñor Óscar Romero, Nayib Bukele, el pastor Dante Gebel, pastor Toby, Cardenal Gregorio Rosa Chávez y el Padre Ignacio Ellacuría. En primer lugar, un 45.31 % respondió que ninguno; luego 27.1 % citó a Monseñor Romero. Más alejado quedaron: Bukele con 8.9 %; Gebel con 4,33 %; el pastor Toby con 4.16 %; Cardenal Rosa Chávez 1.8 % y el Padre Ellacuría con 0.65. 

Rechazo a la minería 

Aunque del total de salvadoreños encuestados el 44.2 % afirmó que cree en la idea lanzada por Bukele acerca de que Dios ha puesto un tesoro de oro bajo nuestros pies, un 32.6 % no cree en ello, el 14.7 % tiene dudas al respecto y un 8.5 % no conoce o no respondió. 

Luego que los diputados oficialistas aprobaran la ley que abrió paso a la explotación de la minería metálica las voces en contra de esta iniciativa han ido en aumento, al punto que diversas organizaciones de la sociedad civil, incluyendo la iglesia católica que ha hecho evidente su rechazo señalando los daños al medio ambiente y la amenaza a la vida. 

En este estudio de Humor Social y Político el 48.33 % de la población, al consultarle sobre la temática, respondió que no creen que el país tenga las condiciones para impulsar proyectos de minería metálica; 14.45 % cree que hay pocas condiciones para ello; 23.51 % sí considera que hay condiciones y el 13.71 % se inclinó por decir que no conoce o no responder. 

¿Apoya la idea del presidente Bukele de implementar la minería metálica? El 48.73 % dijo que no la apoya; 23.51 % dijo que sí; 19.92 % tiene dudas y 7.84 % señaló no conocer del tema o no respondió. 

Si bien el discurso del Ejecutivo enfila hacia promover un concepto de la minería verde, no contaminante, argumentando que hoy las empresas cuentan con tecnología moderna, lo cierto es que en este sondeo el 55.27 % no cree que pueda haber minería sin contaminación ambiental o del agua; 15.92 % también expresó dudas de que no haya contaminación; el 22.12 % cree que sí es posible y 6.69 % dijo no conocer sobre ello. 

Los compatriotas, además, fueron consultados sobre la percepción que tienen en relación con su situación económica con el inicio del año: 49,8 % señaló que es regular; 25.63 % se inclinó a responder que es buena; 6.53 % afirmó que muy buena; 13.96 % que es mala; 3.02 % muy mala y 1.06 % no sabe. 

En este ejercicio académico al consultar a los entrevistados qué nota le pondrían, en una escala del 1 al 10, al trabajo realizado por el presidente Bukele a esa fecha señalaron que 7.73. La nota está por debajo de las calificaciones otorgadas por los salvadoreños en diversas encuestas realizadas por el CEC en los últimos seis años, es decir entre el 2020 y 2024. 

Esfuerzo continuo 

La Universidad Francisco Gavidia viene impulsando, desde 2021, un trabajo de investigación continuo a fin de indagar sobre el humor social salvadoreño, lo que es el salvadoreño, mediante una serie de estudios del comportamiento y esto incluye su sistema de creencias, valores, actitudes ante ciertos temas, lo social, político, entre otros aspectos. 

Según se expone en un comunicado emitido por el CEC ese proceso de exploración ha sido plasmado en los Estudios de Humor Social y Político, que ahora suman nueve. Este último tiene su origen en la Encuesta Rumbo País 2024, titulada La Gente tiene fe. 

Los estudios anteriores son: I) Cosmovisión e ideología (octubre 2021); II) Paradigmas y creencias (septiembre 2022); III) Posverdad (febrero 2023); IV) Decodificación axiológica (julio 2023); V) Importancias complejas (agosto 2023); VI) Estos son los datos, no se enojen (enero 2024); VII) Somos lo que pensamos (abril 2024); y VIII) Hay otros problemas más importantes (julio 2024). Todos estos pueden consultarse en: https://www.disruptiva.media/category/encuestas/ 

El CEC destacó que los nueve estudios que se han realizado “conforman un valioso repertorio que ha explorado diversas áreas, proporcionando una comprensión de la dinámica antropológica, sociológica, psicológica y social del ser salvadoreño”. También adelantó que al completarse diez estudios serán compilados para que se conviertan en un recurso académico de consulta. 

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