Número ISSN |
 2706-5421

Picture of Andree Cardona

Andree Cardona

Internacionalista, consultor y escritor.

A los estudiantes de relaciones internacionales de la actualidad

Hace algunos años la noticia que más impactaba en los salones de clase universitarios, para estudiantes de relaciones internacionales, era el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos -en las presidencias de Raúl Castro y Barack Obama respectivamente-, hace unos ocho o diez años eso era algo impactante, novedoso y en la Universidad eso fue materia de estudio como política exterior, hizo buen debate. Debemos entender que la diplomacia es absolutamente dinámica y que jamás puede ni debe ser estática pues no es su naturaleza.  

Los que somos profesionales de las relaciones internacionales sabemos que desde hace muchos años el mundo bipolar ha dejado de existir. La verdad, nos encontramos en el nuevo milenio con toda la variedad de desarrollo y crecimiento que podemos saber, y que dicho sea de paso nos falta mucho por conocer. Centroamérica se ha encaminado a abrirse a la variedad del establecimiento de las relaciones internacionales, diplomáticas, económicas y comerciales con nuevos socios, no países amigos, socios.  

Dicho lo anterior, estamos inmersos en el concierto de las naciones en medio de una pandemia que ha prolongado su estancia universal, esto nos obliga a abrirnos al mundo, saber que las relaciones diplomáticas cada día son más exigentes y diferentes. Hace unos diez años la diplomacia Pontificia- por ejemplo- no era como hoy, las Nunciaturas Apostólicas, sobre todo en países que se encuentran en guerras fratricidas, son bastante relevantes en la participación de la mediación.  

Países euroasiáticos, árabes y africanos con una cultura absolutamente diferente a la de nosotros, con un cristianismo minoritario, las Nunciaturas Apostólicas han sido determinantes, la diplomacia del Papa siempre ha sido con mucho sigilo, pero, bastante activa y proactiva.  

En El Salvador, nos exigen seguir modernizando y haciendo contemporánea nuestra diplomacia, y podría estar seguro de que va a seguir evolucionando, pues el dinamismo nos anima a mirar no sólo a Occidente como socios y vecinos del desarrollo, sino que también países de las regiones anteriormente mencionadas para poder abrirnos más a las exigencias multilaterales del nuevo milenio.  

La región africana y euroasiática tienen vinculación con nuestros países no hace poco, ya tienen sus largos antecedentes, por lo tanto, no sólo funcionarios políticos pueden establecer y coordinar relaciones, vinculación y acercamientos con académicos y políticos de países de las regiones mencionadas porque nos encaminamos hacia nuevos paradigmas de desarrollo, de la conducción y administración de la política exterior porque las relaciones internacionales lo exigen así.  

Lo mencionado anteriormente debe ser un motivo de estudio para los actuales estudiantes de las relaciones internacionales en las Universidades; cómo El Salvador puede tener mejores acercamientos con países del Medio Oriente, sin descuidar la buena relación con el Estado de Palestina.  

Palestina ha sido un socio importante para el desarrollo en El Salvador, ha estado de cerca con una cooperación permanente desde hace unos años. Además de los países del Medio Oriente podemos no subestimar a Rusia y los países euroasiáticos, la vinculación que tenemos con ellos, debemos y podemos visualizar alianzas académicas que puedan beneficiar a estudiantes que tienen conocimientos de las tecnologías de este nuevo milenio.  

Las relaciones internacionales, son siempre exigentes y jamás se quedan con lo preestablecido, esto quiere decir que siempre debemos procurar la permanencia de la cordialidad y buenas relaciones diplomáticas con nuestros socios estratégicos e importantes que ya tenemos- Estados Unidos, Unión Europea, México, entre otros- además de poder ver lo positivo, por ejemplo, en el viaje del presidente a Turquía y los países árabes que han sido potencia económica en la región donde se encuentran y que pueden significar nuevos acercamientos con instituciones académicas que antes probablemente no se había tenido y eso es algo positivo.  

Si tuviese la oportunidad de dirigirme a las nuevas generaciones de estudiantes de relaciones internacionales les diría que aprovechen la rapidez que hoy tiene la información, además, la diplomacia Pontificia que es una diplomacia poco comentada desde la academia, pero tiene un excelente funcionamiento y coordinación. Además, el acercamiento de El Salvador con países que son primer mundo como Dubái, podemos estar sabedores que la política exterior de la república se ha abierto al mundo lo cual es plausible, auguro que nos va a colocar de una forma diferente a nivel global a medida busquemos a socios que nos puedan proporcionar buenas oportunidades.  

Comparte disruptiva