José Enrique Barraza
EL PATRIMONIO NATURAL QUE ESTÁ MURIENDO EN LOS CÓBANOS
- ,
- , Ciencia, Ciencias del mar
Comparte disruptiva
Los factores ambientales (contaminación, temperatura elevada, demasiado tiempo acumulado expuesto al sol) es determinante en la recuperación o no de un coral blanqueado, si es muy intenso, se quiebran, se pierde y muere. Sin los arrecifes de coral, los peces se quedan sin refugio, y sin alimento.
En El Salvador es más complejo, ya que el único lugar donde tenemos esta especie de coral que construye arrecife (Porites lobata) es en el Área Natural Protegida, Complejo Los Cóbanos, y esta especie sirve de alimento a varios peces que cuando expulsan sus heces, se produce el coral molido que forma parte de la arena color beige, característica de Los Cóbanos. Si mueren los corales duros de esta área natural protegida, se pierde un patrimonio natural nacional, y esto afectaría a los peces, a la playa y a las actividades económicas asociadas.
Entre el año 2014 y el 2018 se ha registrado un fuerte evento de blanqueamiento que causó la muerte y pérdida de cobertura de las colonias de coral constructor de arrecife Porites lobata en el área de la playa El Faro del área natural protegida Complejo Los Cóbanos, Sonsonate. Sin embargo, las colonias de mayor volumen y tamaño de la misma especie ubicadas a una profundidad entre los 2.5 a 4.0 metros según la marea, presentaron un severo blanqueamiento con cierta pérdida de tejido, pero se recuperaron posteriormente. La combinación de temperaturas elevadas, irradiaciones solares intensas acumuladas, floraciones algales nocivas, sedimentación y posible contaminación, pueden asociarse a este episodio destructivo.
Los intensos eventos causados por temperaturas elevadas que originan varias horas o días acumulados de este tipo de condición extrema a los corales, han provocado un intenso evento de blanqueamiento entre 2014 a 2017 (Eakin et al., 2016). En El Salvador, las colonias intermareales y submareales de Porites lobata también han experimentado blanqueamiento intenso que ha causado mortalidad y pérdida de esta especie de coral, lo que se describe en este artículo.
Los corales formadores de arrecife se encuentran distribuidos en un cinturón tropical que existe en la tierra (Guan et al., 2015). En América se ubican tres grandes áreas con ocurrencia de este tipo de ecosistemas marinos construidos por corales duros: Brasil, el Caribe y el Pacífico del Este. En esta última región se ubica un cinturón de corales formadores de arrecife en México, algunos países de Centroamérica, y también en Colombia, Ecuador, así como las islas Revillagigedo, del Coco, Malpelo, Galápagos, entre otras (Cortés, 2003). Recientemente, Romero-Torres et al. (2018), propusieron un patrón de conectividad marítima entre los principales géneros que forman estos arrecifes, que en esta franja marítima son Acropora, Pavona, Pocillopora y Porites. En El Salvador se ha documentado la ocurrencia de restos de al menos cuatro especies del tercer género en la zona intermareal y submareal del área natural protegida (ANP) Complejo Los Cóbanos (Reyes- Bonilla y Barraza, 2003). También en ese mismo lugar, se registró la existencia de colonias del coral constructor de arrecife Porites lobata que se ubican desde la línea intermareal hasta 2.5 metros de profundidad en marea baja (Molina, 2004; Navarrete y Segovia-Prado, 2007; Barraza, 2011, 2017). Otras especies de coral duro observado en el área son Psammocora obtusangula y P. stellata (López y Jiménez, 2008).
Materiales y métodos
Mediante registros visuales al azar en apnea y buceo autónomo, realizados sin frecuencia definida entre enero de 2005 a septiembre de 2018, se fotografiaron las colonias de Poritis lobata en la zona intermareal de la playa El Faro (punto 1 en el Mapa) del Área Natural Protegida (ANP) ya mencionada; así como de otras colonias ubicadas en una zona más profunda (punto 2 en el mapa) al norte de la primera, tomando ventaja de mareas bajas intensas en la mayoría de los muestreos. Se ha calculado que la cobertura de las colonias de coral en la primera y segunda áreas mencionadas abarcan aproximadamente 1 km2 y 0.1 km2 de superficie sobre el fondo, respectivamente. También se ha determinado que las colonias intermareales presentan tamaños diversos con diámetros que oscilan entre 0.1 a 1.5 m, en cambio las submareales presentan entre 1.0 a 2.5 m de diámetro.
Con base al número de colonias que presentaban diferentes patrones de coloración en fotografías, se establecieron cuatro categorías: a) sin evidencia de blanqueamiento (color pardo amarillento), b) parches pero aún conservaban parte de su coloración normal, c) decoloración tenue (suave), d) blanqueamiento total. Para efectos de comparación se presenta el aspecto del coral en estas cuatro categorías. Desde 2014, usualmente se registró la temperatura del agua.
Resultados y discusión
Los resultados de 13 años de monitoreo de las colonias de Porites lobata indican un incremento del blanqueamiento de corales desde el año 2015 al 2018. El siguiente gráfico presenta las tendencias de períodos de aparente normalidad y las otras categorías ya mencionadas. Entre el año 2005 al 2014 se observó la ocurrencia de parches y decoloración suave en las colonias de El Faro y su posterior recuperación. Algunos de estos eventos, entre 2010 y 2013, estuvieron asociados a floraciones algales nocivas causadas por el dinoflagelado Cochlodinium polykrikoides (Espinoza et al., 2012) que afectaron las colonias de Poritis lobata.
Entre 2014 y 2017, también ocurrieron este tipo de floraciones que afectaron al coral mencionado. Sin embargo, la intensidad y frecuencia de los blanqueamientos se incrementaron, particularmente en el segundo semestre de 2015, cuando ocurrió un evento extremo de blanqueamiento total que afectó hasta las colonias submareales.
El nivel de blanqueamiento fue intenso en las colonias intermareales con un total del 100 %. Posteriormente algunas colonias se recuperaron, pero otras no y rápidamente se desprendió el material de carbonato de calcio y algas colonizaron. En otros casos, las algas invadieron las áreas internas de una colonia que perdió parte de su cobertura.
También se incrementó el número de colonias afectadas por franjas y puntos dispersos de color rosado. Las primeras observadas principalmente después de eventos de floraciones algales nocivas asociadas a C. polykrikoides, los segundos a blanqueamientos intensos, aunque también se observaron en condiciones aparentemente “normales”. Después del intenso evento de pérdida de más del 40 % de cobertura de Porites lobata en la zona de playa El Faro, evidente en octubre de 2016, aparentemente se registró recuperación de las colonias fragmentadas y sin fragmentar a finales de 2017 y comienzos de 2018. Sin embargo en septiembre de 2018, se observó nuevamente un evento de blanqueamiento intenso y pérdida de un 40 – 50 % de la cobertura superviviente del evento de 2016.
También los resultados indican que la mayoría de los eventos de blanqueamiento ocurren en el segundo semestre del año, cuando se elevan las temperaturas del agua y particularmente desde 2014 se ha presentado un patrón meteorológico de ausencia de lluvias varios días consecutivos del mes de julio, incrementando las condiciones extremas de radiación solar, así como episodios con temperaturas de agua superficial superiores a los 30 °C, que afectaron a estas colonias intermareales (Guan et al., 2015; Eakin et al., 2016).
Las colonias submareales aparentemente presentaron mayor resiliencia al blanqueamiento intenso observado en playa El Faro. En el período de observación únicamente se observó total blanqueamiento en enero de 2016, contrario a lo observado en el punto 1. Posiblemente la profundidad que oscila entre 2.0 a 3.5 metros, según la marea, permite un ambiente menos extremo de irradiación solar, considerando que sugirió que colonias de Porites en condiciones experimentales, expuestas a poca profundidad y luz en condiciones simuladas de marea baja presentan mayor afectación al blanqueamiento (Smiths y Birkeland, 2007). Observaciones obtenidas en enero de 2016 reflejaron que estas colonias comenzaron a recuperarse en 42 días, a pesar de cierta pérdida de la cobertura coralina y la colonización de algas.
Conclusiones
Entre 2014 a 2018 han ocurrido eventos intensos de blanqueamiento y pérdida de cobertura del coral formador de arrecife Porites lobata en playa El Faro del área natural protegida Complejo Los Cóbanos.
El blanqueamiento ha sido menos frecuente en las colonias de la misma especie que se encuentran únicamente en un área submareal, aunque sí fue afectado por el evento de finales de 2015.
El blanqueamiento se asocia a días acumulados de irradiación solar por poca nubosidad en los meses de junio-julio, días acumulados de temperaturas altas superiores a 30 °C, ocurrencia de eventos de floraciones algales nocivas y posiblemente contaminantes físicos y químicos. Es importante continuar con estos monitoreos.