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¿Por qué bajan los homicidios…?

Desde que asumió el mandato el Presidente Nayib Bukele, los homicidios han comenzado a bajar a niveles sorprendentes, rompiendo la lógica estadística de las tendencias a nivel de un país. Las cosas no cambian por arte de magia, hay que “diseñar decisiones” para modificar comportamientos y alterar el curso de las tasas de manera positiva. Detrás de la tasa de homicidios hay múltiples factores: Culturales, sociológicos, limitada institucionalidad, descontrol armamentístico, ineficiencia judicial e investigativas, migración, inequidad, pandillas, etcétera.  

El Plan de Control Territorial –de cual sabemos poco- está funcionando mejor que los sistemas estratégicos más sofisticados del pasado. ¿Cuáles son las razones de este cambio?, veamos algunas hipótesis:  

1.- El Presidente está encima del fenómeno: Observamos al mandatario tratando el tema a nivel discursivo y operativo de modo casi cotidiano; toma decisiones, informa, habla sobre el problema, envía señales constantes, exige resultados, tuitea, convoca conferencias de prensa, aparece constantemente el gabinete de seguridad en acción, más soldados, más equipo, policías, etcétera. El tema de violencia y su abordaje está en la agenda del Presidente de modo central. Es posible que sea el problema que más tráfico de información haya generado en los últimos tiempos. 

2.- Un equipo más táctico y operativo: No hay grandes figuras intelectuales del país, ni se ven asesores internacionales de peso; se trata de un equipo más táctico, que está haciendo; y a la vez se nota mayor interdisciplinariedad, es decir varias carteras de Estado en territorio. Antes los Ministros eran más de escritorio, de planificación y estratégicos; hoy parecen ser de campo. Este cambio metodológico es notorio en todos los ministerios –salud, agricultura, turismo, educación, etcétera-. 

3.- Un cambio de actitud en la PNC: Da la impresión que el modelo autoritario y violador de los Derechos Humanos ya no se tolera; en el pasado la Inspectoría de la PNC se manejó con paños tibios; y esta actitud beligerante en las comunidades tenía respuestas de parte de las pandillas. Si bien se nota un enfoque represivo en el manejo de la seguridad, al parecer la forma o el modo de cómo se está acercando la policía a las comunidades está cambiando. 

4.- Los referentes y enlaces de la comunidad hablando el mismo idioma: Tanto Salvador Alas, Comisionado Presidencial de Juventud, como Carlos Marroquín de la Unidad de Reconstrucción del Tejido Social, son personas conocidas y/o admiradas en las comunidades (aunque suene muy ilógico para los sectores académicos, intelectuales y políticos); están llegando in situ a “escuchar” y a resolver algunos problemas o necesidades de la gente. Son mediadores de comunicación y amplificadores gubernamentales; esto antes era impensable, y hoy se está haciendo. 

5.- Apretando en Centros Penales: Muchos líderes de pandillas están en la cárcel, y en estos recintos los limitados privilegios que poseen los reos son muy valorados. Si las estadísticas de homicidios suben, las medidas extraordinarias en centros penales se hacen más radicales, si bajan, sucede lo contrario. Es una buena fórmula y tiene lógica. 

6.- Redes sociales y estrategias de comunicación: Nadie podrá discutir sobre la capacidad comunicativa de este gobierno a través de las redes sociales; cada paso que dan, los community managers suben fotos y mensajes. Es una estrategia de comunicación muy efectiva y sistemática, cosa que antes no pasaba. También presenta un modelo de gobierno que está haciendo cosas por la gente. 

7.- Soluciones de corto plazo y de alto impacto: Es posible que las soluciones que se hayan diseñado para enfrentar el problema de violencia sean de corto plazo, pero de alto impacto “para los jóvenes”. Soluciones pragmáticas, que no resuelven una situación de modo sustentable, pero que articulan con necesidades concretas y con inmediatismo; un curso corto, materiales deportivos, un taller artístico o cultural, un proyecto, etcétera; es decir, oportunidades de cortísimo plazo que permiten un giro de timón en la vida de jóvenes en riesgo y que no se imaginan un proyecto universitario de largo plazo. 

8.- Manipulaciones fallidas y nuevas oportunidades: Los partidos políticos intentaron tranzar y negociar con las pandillas y es muy posible –pese a lo perverso- que fueran desleales o no cumplieran sus compromisos; el movimiento y luego partido Nuevas Ideas representó –posiblemente- un parteaguas de entendimiento en un nuevo lenguaje menos “ofensivo” para las pandillas. 

9.- Las manos duras… que no fueron: Los modelos de “manos duras” se fueron antagonizando, pero por vías no convencionales: Asesinatos selectivos y propaganda; fueron un verdadero fracaso, por la fragmentación entre el sistema judicial, Fiscalía y Policía –cada uno por su lado-. No obstante, fue el modelo que imperó y el que amplificó el antagonismo y empoderó a las pandillas. 

10.- Los detractores y otras hipótesis: Muchos críticos de Bukele no creen en su “modelo ejecutor” y en su limitada planificación, pero por el momento los datos hablan por sí mismos, y si esto se mantiene es de analizar, aplaudir y replicar. En caso contrario, sería criticable. Otros sospechan de una tregua más cauta y/o sofisticada ya que es extraño que los datos caigan de manera abrupta; y algunos han señalado que hay una sustitución de homicidios por desaparecidos; pero esto tarde o temprano se sabrá, todavía hay buenos periodistas.  

Estemos o no de acuerdo con estas y otras medidas, lo cierto es que los homicidios bajan y eso es bueno para todos; no sólo se salvan vidas, sino que además se envía un mensaje positivo para inversores extranjeros, el país está mejorando.  

Estamos ante un nuevo paradigma y estilo de gobierno, es un fenómeno disruptivo, y representa un cambio de paradigma, que a muchos cuesta entender; algunos aspectos de su estilo gubernamental o comunicativo no gustan o son criticables, aunque también es muy criticable todo lo que robaron sus antecesores. 

Veamos cómo van las cifras, los datos y las estadísticas; seis meses es poco tiempo para hacer juicios de eficacia, ya después del año podremos tener más certeza del estilo y perspectiva de éxito o fracaso. Por el momento los homicidios bajan…  

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