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Vacunas: ¿Cuántas va a querer, amor?

La carrera por una vacuna para detener la pandemia de COVID-19 es intensa, y participan más de ciento noventa iniciativas de instituciones públicas y privadas de los países más desarrollados desde el punto de vista bio-tecnológico.  

Normalmente, el proceso de una vacuna implica tres fases en unos diez años intensos de pruebas, bajo una supervisión independiente; se inicia con una fase de exploración, luego la etapa preclínica de cultivos, posteriormente se solicita el apoyo de un IND (Investigational New Drug) y finalmente se pasa a las tres fases: I ensayos con grupos pequeños y respuesta inmunológica, II ensayo con un grupo mayor y se vigila seguridad, capacidad inmúgena, dosis y métodos de aplicación y III pruebas doble ciego y placebos con miles de personas y efectos colaterales. Luego de ser aprobado todo por la FDA (Food and Drug Administration) puede haber una fase IV de VAERS (Vaccine Adverse Event Reporting System) con seguimiento de los Centros de Control de enfermedades (CDC: Medication Safety Program) a las empresas farmacéuticas.  

Oxford – Astra Zeneca logra 70.4% de efectividad a un manejo más eficiente de temperatura (-2° a -8° centígrados), mientras que PfizerBioNtech y Moderna logran más de un 90% a temperaturas bajo cero mucho más complejas (-70° a -80° centígrados); otros cien proyectos siguen en carrera, aunque hay otros proyectos de Rusia y China (Sputnik V) que ya pasaron a la fase tres de modo acelerado. El nuevo concepto de inmunidad y anticuerpos es inocularnos un mensajero ARN para que produzca los antígenos al SARS-Cov2. 

Como siempre, las teorías conspirativas no se hicieron esperar y algunos dicen que es muy riesgoso jugar con las moléculas del ácido ribonucleico (mARN), mientras que otros creen que a Latinoamérica la utilizarán de Conejillo de Indias para culminar la fase tres de muchos proyectos.    

El Ministro de Salud ya informó que pronto se comenzará a vacunar en El Salvador, y que será gratis para un 20% de la población y el resto tendrá que pagar la vacuna y las dosis que se demanden. Esto abre un interesante debate: ¿Cuántas personas se necesitan vacunar para que se termine la pandemia? Vamos a especular con algunos datos aproximados… 

Colegas especialistas biólogos matemáticos nos dicen que esta es la fórmula: Proporción p sería p ˃ 1-1/R₀; es decir con un R₀ de 1.33 sería al 25% de la población; mientras que con un R₀ de 3 el dato subiría casi al 70%. En función de las condiciones fiscales, económicas públicas y privadas una cifra racional podría ser 35% de la población, 2.4 millones de dosis… 

El problema es que al declarar “reservada la información de Covid-19” la comunidad académica no tiene acceso a las bases de datos y no sabemos cuál es el R₀ real. Entonces, es muy posible que se compren vacunas a ciegas y seremos parte del gran negocio de la industria Pharma; léase esto tanto para el sector público como para el sector privado. Según el Centro de Modelaje Matemático “Carlos Castillo-Chávez” de la Universidad Francisco Gavidia (UFG) con el R₀ actual de 1.24 necesitaríamos vacunas para el 20.5% de la población, pero es un dato que se debería verificar en bases de datos las cuales no se pueden conocer por “seguridad nacional o falta de transparencia” … 

Seguramente necesitaremos vacunas para cuatro segmentos: 1) Personal de salud y primera línea (Aprox. 50,000); 2) Enfermos crónicos (10,000 aprox.); 3) Adultos mayores (768,000 aprox.); y 4) Pacientes hospitalizados y en consulta recurrente (¿?). En síntesis, un millón de dosis para comenzar. Luego deberíamos seguir con un “plan de vacunación” con los nexos activos COVID-19 vigentes al momento de que llegue la vacuna, y se descartan los Municipios sin contagio y los contagiados. 

Sabemos que es mucho pedir: Planes, matemáticas, cálculos, segmentar, hacer ciencia, etcétera; pero les dejamos las ideas para que los amigos del marketing político y después las autoridades de salud, vayan pensando en algo, sobre todo en garantizar la cadena de suministro de frío que es crucial. 

Por último, habrá que esperar y conocer la respuesta inmunológica de la vacuna y saber cuántas dosis al año se deben aplicar (la protección de Pfizer y BioNTech se obtuvo siete días después de la segunda dosis y la inmunidad 28 días después), y si cada año se deberá aplicar; también si habrá o no efectos colaterales. Por el momento hay mucho optimismo y se espera que en 2021 se controle la pandemia. 

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