Colegio Médico de El Salvador preocupado por la débil formación educativa en medicina

El presidente del Colegio Médico de El Salvador (COLMEDES), Roberto Montoya Argüello, expuso su preocupación por la baja preparación con que están saliendo las nuevas generaciones de estudiantes de medicina, como resultado del arrastre de deficiencias que se lleva desde el nivel de Educación Básica. 

La situación, según indicó, ha llevado a la gremial a incrementar los esfuerzos de capacitación en el sector. “Ahora estamos todos los sábados educando a nuestra población médica general, a los jóvenes que están saliendo un poco deficientes”, afirmó durante la entrevista televisiva Frente a Frente del 1 de diciembre. 

Montoya aseveró que la situación se complicó como resultado de que en la pandemia del COVID-19. Las instituciones educativas, incluyendo las universidades que imparten esta carrera, tuvieron que brindar las clases en línea, y luego semipresencial. “Con los estudiantes que están saliendo de la universidad, en este momento, ya se sienten los efectos; y pues sí, nos preocupa a todos y (pensar) quién me va a atender a mí; o sea la atención (de la salud) en los próximos años podría ser sí, muy, muy por debajo de los niveles que tenemos actualmente o que hemos tenido. Entonces se está necesitando reforzar la educación médica”, citó. 

El especialista sostiene en esta situación abona el hecho de que en la enseñanza media los alumnos vienen avanzando con promociones automáticas, a lo que suma que muchas instituciones de Educación Superior no tengan un buen filtro que permita acoger al estudiante que tenga la capacidad intelectual para seguir esta carrera. Aunque también reconoce que algunos de estos centros, conscientes de esta situación, están trabajando en modificar sus pénsum. 

“Así que el gremio está consciente de esto; tanto los privados como los de salud pública están sintiendo esas deficiencias en las personas que llegan a hacer residencia para buscar una especialidad. El asunto es que esas carencias que traen tienen que ser llenadas durante este otro periodo de formación, (y eso) requiere más dedicación de parte de los profesores universitarios», dijo el presidente del COLMEDES quien forma parte del consejo consultivo de un centro de estudios superiores. 

Formación de estudiantes 

El infectólogo, Iván Solano Leiva, quien también participó en la entrevista, recordó cómo en los años 70 y 75 al graduarse como médicos generales tenían un nivel de preparación fuerte de tal forma que podían diagnosticar y tratar con éxito enfermedades pulmonares complicadas. “Ahora tenemos más universidades que tienen más facultades de medicina. Sí creo que es importante que como Colegio Médico podamos reunirnos y podamos ir llevando a la discusión y trabajar en forma conjunta para mejorar la formación de nuestros futuros colegas”, advierte el infectólogo. 

Solano Leiva expuso que, durante los primeros cuatro años y medio, el estudiante pasa por un proceso de adquisición de conocimientos básicos de la medicina, sin contacto en los hospitales; en el segundo semestre del cuarto año y hasta finales del sexto año la mayoría de las facultades de medicina introducen al estudiante de medicina a los hospitales y llega a comenzar a aprender ya teniendo contacto con pacientes, pero no ha atenderlos, rotan en todos los hospitales; al séptimo año de carrera hacen internado en los hospitales, siempre rotando, pero ya tienen responsabilidades como por ejemplo, poner indicaciones médicas de los pacientes, hacer turnos cada tres días, hacer visitas con los médicos, seguir indicaciones, ir a traer exámenes, etc.; y ya el último año que es de Servicio Social donde, a través de un proceso los mandan a diferentes lugares del país, sobre todo a unidades de salud u hospitales del interior, en donde ya hacen más práctica, tienen que operar, atender embarazadas a dar a luz, hacer apendicetomías.  

Al graduarse como médicos, si deciden por alguna de las cinco especialidades (Medicina interna, Cirugía, Ginecología y obstetricia, Psiquiatría) deben someterse a un examen y estudiar tres años más. Luego pueden hacer una subespecialidad durante otros dos años. 

El doctor Montoya advierte que los médicos de año social en la mayoría de los casos salen a brindar atención primaria de salud, en donde se hace prevención, pero si sus conocimientos no van bien fundamentados el servicio que darán será deficiente y si el paciente se enferma de algo que no debería, tiene que ser enviado a un hospital, lo que implicaría una saturación del sistema. 

“Urge esta reforma que tenemos que hacer. Hay un proyecto de ley que al graduarse de medicina de ocho años van a ser licenciados en medicina, ya no serán doctores; entonces la residencia o búsqueda de una especialidad se toma como para doctorarse; y la subespecialidad, como el doctor que es infectólogo además de haberse graduado como médico internista, esa ya es una subespecialidad que le da el título de más para ser doctor en tal rama”, explicó el representante del COLMEDES. 

Los galenos durante la entrevista también informaron que, como gremial, lanzan una campaña de prevención de enfermedades y riesgos sanitarios denominada “Redoblemos el cuidado de la salud en el fin de año”, como parte de su función de velar por la salud de los salvadoreños. 

Campaña de prevención de fin de año 

Montoya recordó que se está llegando a la época en que se incrementan las enfermedades o situaciones que afectan la salud de la población, por ejemplo; accidentes de tránsito por alcoholismo; los accidentes por quemaduras, primordialmente en niños; reacciones alérgicas por llegadas de vientos o enfriamientos. “Esencialmente ese tipo de problemas es lo que trataremos de educar a nuestra población y desde luego con la colaboración de todos los médicos del país para que se disminuya o se llegue a evitar totalmente este tipo de problemas”, agregó. 

Al respecto Solano destacó la importancia de brindar mensajes de prevención para educar a los ciudadanos, en relación a los riesgos a los que se someten de adquirir enfermedades como las diarreicas, sino se siguen las medidas higiénicas, por ejemplo, en la manipulación de los alimentos