Número ISSN |
 2706-5421

Geeky little boy studying and wearing glasses
Picture of José Rodolfo Pérez

José Rodolfo Pérez

Hablemos sobre el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad: Estrategias para padres

En la actualidad hablar sobre Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es motivo de interés para profesionales de la salud, educadores y padres y madres de familia. Este tema que parece relativamente reciente, quizás por la cobertura mediática de los últimos años, es en realidad un fenómeno que se ha conocido y evolucionado nosológicamente desde principios del siglo XX.

El TDAH hizo su aparición en 1902 de la voz del pediatra George Still, el cual describió el fenómeno como un “defecto del control moral” en los niños; descubriendo que algunos de ellos no podían controlar su conducta a pesar de no existir déficit intelectual (Lange et al., 2010).

Desde entonces hasta la fecha, el TDAH ha sido descrito de múltiples formas por la bibliografía especializada y por diferentes manuales de diagnóstico. En su última publicación, el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales V (American Psychiatric Association, 2013), describe el fenómeno como un trastorno del neurodesarrollo caracterizado por un patrón persistente de inatención e hiperactividad que interfiere con el funcionamiento que se espera del individuo en función de la situaciones en las que se encuentre (escuela, familia, otros).

Una vez establecido esto, y no siendo el propósito la profundización histórica ni teórica-técnica del TDAH, se exponen algunas estrategias simples que padres y madres de familiar pueden llevar a cabo para apoyar al niño/a en el funcionamiento escolar; teniendo en cuenta que es una de las áreas de desempeño fuertemente afectada por el TDAH, lo que se convierte en motivo de vergüenza, baja autoestima y aislamiento social, entre otros.

El sistema familiar debe ser un gran aliado de un niño/a que padece TDAH. El rol de los padres tiene un lugar en la modificación conductual que se desea llevar a cabo. Algunas estrategias que los padres pueden emplear para apoyar a sus hijos/as con TDAH son:

  • Considerar un enfoque de crianza distinto: En muchas ocasiones es importante modificar el enfoque de crianza hacia el niño/a con TDAH, quienes usualmente requieren normas disciplinarias claras y explicitas o una supervisión más constante para las actividades o tareas.
  • Identifique las fortalezas: Se hace necesario no solamente observar las conductas o actividades en las que el niño/a requiere mejorar, es necesario también identificar aquello para lo que es bueno o que es de su preferencia, reforzarle en ello y practicarlo junto con él, al menos una vez a la semana. Esto invita a ser más proactivos en la disciplina, es decir, elogiar lo positivo en lugar de enfocarse solamente en aquello que no está haciendo bien o que necesita mejorar. También se hace importante elogiar los esfuerzos y avances en las actividades o tareas que el niño/a este realizando, de forma que sucesivamente mantengamos su interés en aquello que se espera que logre.
  • Establecer una rutina de actividades: En los niños/as con TDAH el establecimiento de una rutina u horario de actividades no puede faltar. Hacer explícito aquello que esperamos que el niño/a lleve a cabo evita confusiones y le facilita aprender la organización de su tiempo. También, debe establecer un tiempo de descanso entre tareas, de forma que fomente en el niño una mejor autorregulación de sus procesos cognitivos y emocionales.
  • Búsqueda activa de un espacio de trabajo: No es extraño que en muchos hogares los padres han establecido previamente un lugar para hacer las actividades o tareas de la escuela, sin embargo, a los niños/as con TDAH esto no puede resultarles productivo. Ante esto es importante buscar, junto al niño, un espacio en donde perciban menores distracciones y pueda realizar las tareas o actividades que se le solicitan.
  • Supervisión: Al principio será necesario supervisar el inicio de las actividades o tareas que el niño/a lleve a cabo, especialmente si se espera un desempeño específico en estas. Ayude a su hijo/a dividiendo las tareas o actividades en pasos pequeños, empezando por los insumos que necesitará para realizar cada paso hasta el resultado que se espera obtener. Pronto podrá darse cuenta de que la supervisión podrá alternarse y enfocarse en otras áreas.
  • El “éxito”: Esta palabra, aunque corta, puede ser crucial en los niños/as con TDAH. Ayude a su hijo/a redefiniendo esa palabra, en nuestra sociedad occidental el “éxito” ha sido frecuentemente definido en función de los logros académicos, algo que, sin lugar a duda, no es del todo cierto. El éxito puede estar en el desarrollo de la creatividad, los deportes o las artes, redefinir el “éxito” puede ser estimulante para el niño/a y unirles más como familia.

Se ha tratado de condensar, en un grupo muy reducido, algunas de las estrategias que pueden llevarse a cabo con los niños/as que padecen TDAH en un grupo familiar. En su mayoría se combinan formas conductuales y cognitivas de abordaje, además de requerir una implicación más activa de los padres respecto a sus hijos/as con TDAH. Debe aclararse que estos planteamientos no sustituyen un diagnóstico o la visita con un profesional de la salud mental ni pretenden contraindicar los tratamientos que ya se reciben; por el contrario, se busca brindar apoyo al ofrecer opciones que puedan resultar convenientes para el niño/a según sea la valoración de cada padre de familia.

Referencias

American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders: DSM-5. American Psychiatric Pub Incorporated.

Lange, K. W., Reichl, S., Lange, K. M., Tucha, L., & Tucha, O. (2010). The history of attention deficit hyperactivity disorder. Attention Deficit and Hyperactivity Disorders, 2(4), 241-255.

Comparte disruptiva