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Susana Joma

«Si la propuesta de Ley de Educación Superior se aprueba sin cambios complicará situación de la UES», Juan Rosa Quintanilla

El rector de la Universidad de El Salvador, Juan Rosa Quintanilla, aseguró que el anteproyecto de Ley de Educación Superior, que el ministro de Educación presentó a la Asamblea Legislativa, tiene elementos que afectan la autonomía de ese centro de estudios y que contrarían lo establecido en la Constitución de la República. 

Quintanilla, en entrevista con Disruptiva Media, sostuvo que esto “nos tomó por sorpresa” considerando que hace unos dos o tres años el anterior rector, Roger Arias, había dado su firma a una propuesta ministerial en la que se mejoraría las condiciones de la UES. 

Uno de los elementos de la nueva propuesta de ley en donde considera que se vería afectará la autonomía institucional, si se aprueba tal como está, es el que supedita la entrega de recursos a la institución a la disponibilidad financiera del gobierno. “Nos parece que eso atenta en contra de la autonomía universitaria, tomando en cuenta que está consagrada en el artículo 61 de la Constitución, en dónde establece que la Universidad tendrá un presupuesto tal que le permita su funcionamiento, y, por supuesto, también tendrá autonomía en lo académico, en lo administrativo y en lo económico”, precisó. 

El rector se opuso a que la institución esté en esa situación, porque cuando el vicepresidente de la República Félix Ulloa les mostró una propuesta de reforma a la Constitución de la República lograron establecer que la UES tendría un 3 % de presupuesto. 

Sostiene que la institución ya está complicada porque el gobierno les adeuda fondos de presupuestos anteriores y no descarta que el panorama se agudice en el futuro si el artículo de la iniciativa de Ley de Educación no se modifica. 

Según datos provistos por Quintanilla, el Gobierno debe a la UES $49.3 millones, pero luego de que se reunieron con el ministro de Hacienda en lo que va de abril y mayo les han pagado 9.2 millones de dólares que “nos ayudan a oxigenar y poder salir de los compromisos que tenemos”.  

En palabras del funcionario universitario, la deuda del Ejecutivo con ese centro de enseñanza ha fluctuado entre $49 y $55 millones esto en la medida que les ha ido trasladando fondos para suplir ese rezago. Sin embargo, esperan que pronto les termine de dar los fondos del presupuesto correspondiente a 2022, para luego avanzar con lo del 2023 y 2024. 

Este centro de educación superior tiene 60,200 estudiantes y anualmente un promedio de entre 20,000 y 25,000 tocan sus puertas. “Este año que ya está en curso fue el que en los últimos años ha habido una menor demanda, 18,000 estudiantes, de los cuales siempre hemos hecho un esfuerzo para que un promedio de entre 12,000 y 12,5000 puedan ingresar a las carreras de su preferencia”, detalló el rector. 

La universidad pública también cuenta con 1,200 docentes de planta, cifra a la que se debe añadir los que laboran hora clase.  

El representante de la UES detalló que, al inicio del año, por la falta de fondos, tenían una deuda de $19 millones de dólares con los proveedores, que incrementó a $21 en enero, pero que para mayo ha caído a $14.8, porque han podido pagar en la medida que el gobierno les ha ido transfiriendo de forma paulatina los $9 millones.  

Otro de los elementos del anteproyecto que levantan alarmas en la UES siempre en el tema de autonomía es lo relacionado con el punto de la acreditación institucional que se plantea en la propuesta de normativa.   

Quintanilla dijo que, si bien es un deber de los centros de enseñanza de este nivel educativo estar al día con la acreditación docente, cree que, en el caso de la Universidad de El Salvador, no debería ser obligatorio que lo haga como condición para seguir funcionando. 

“Nosotros creemos que tenemos un reglamento de escalafón que define perfectamente el proceso de selección de nuestros profesores, y como tal son esos que cumplen con dicho perfil los que incorporamos a la planta docente; en este caso nos están llevando también a que nosotros debemos de acreditar a nuestros profesores que, dicho sea de paso, sin (necesidad de) que sea obligatorio un promedio de entre 800 y 1,000 profesores, ya han sido acreditados a nivel de la Dirección de Educación Superior, pero creemos que es una cuestión también que debería de quedar a la decisión de la institución el hacerlo”, afirmó. 

Explicó que es preocupante que el anteproyecto de Ley de Educación Superior se plantee así y no descarta que la institución, cuando den su postura oficial, proponga modificarla. Y es que él considera necesario que con respecto a este tema el gobierno y los diputados escuchen a otros sectores involucrados. 

Coincide con el especialista educativo, Óscar Picardo, de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), en evaluar como positivo que la propuesta de normativa establezca el uso de créditos académicos en lugar de unidades valorativas, como se estila hoy en día, porque eso permitirá que el país esté homologado con otros de la región y facilitará los procesos de internacionalización. 

Sin embargo, el funcionario hace un llamado a la Asamblea Legislativa, al presidente de la República, Nayib Bukele, a que esta ley no sea aprobada de manera rápida, sino más bien que se haga las consultas respectivas para que los actores puedan dar opinión con respecto al contenido de esta. 

Insiste en que, de cara a luchar por el respeto de la autonomía de la UES, harán los señalamientos necesarios para que se hagan cambios en la legislación de Educación Superior propuesta en el Legislativo: “Si la decisión es no escucharnos dejaremos constancia de lo que hemos planteado y será la historia la que nos juzgue sobre el destino de nuestra universidad». 

En ese contexto, consultado sobre el porqué la institución volvió a prestar algunas áreas para albergar a periodistas que cubrirán la toma de posesión del presidente Nayib Bukele, pese a lo que esta y la comunidad universitaria ha sufrido en anteriores concesiones, el rector Quintanilla argumentó que no pueden abstenerse a hacerlo, debido a que el centro universitario también se beneficia, bajo convenios, del apoyo de otras instituciones, por ejemplo, el caso de los hospitales públicos en donde estudiantes de medicina van a complementar su aprendizaje, o los de agronomía que hacen prácticas en el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria Forestal (CENTA). 

Ante las voces que señalan que en esta ley se invisibiliza la UES el rector señaló que “probablemente ese sea uno de los propósitos ahí contenidos”, sin embargo, también destaca que están trabajando para que tenga presencia y ha dado su aporte para el desarrollo del país. 

En una entrevista que Quintanilla sostuvo el mismo lunes en la mañana, en una estación radial, dejó claro que más allá de que se emita una nueva Ley de Educación Superior, para realmente lograr cambios en la formación de los salvadoreños se debe revisar el modelo educativo, empezando desde parvularia hasta la universidad, para asegurar que los jóvenes logren los conocimientos que les permitan desempeñarse en el nivel superior. 

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